Cuando un joven de hoy intenta asegurar su coche ya sabe que va a tener que pagar una prima muy superior a la media. Pero eso cambiará en las próximas décadas, porque el colectivo con más siniestralidad pronto pasará a ser el de mayores de 65 años.
Según declaró Pilar González de Frutos, presidenta de Unespa, en la entrega de los Premios «Galicia Segura» de Fundación Inade, «el gran reto socioeconómico que se nos presenta a todos los países es el envejecimiento poblacional. Nos cuesta entender este cambio, pero es un giro copernicano, con importantísimos elementos positivos que ya están cambiando la faz del mundo, pero aún cambiará más».
En su opinión, «en algún momento que podemos estimar entre el 2033 y el 2040, los conductores de más de 65 años pasarán a provocar más accidentes de tráfico que los jóvenes. Pero es que para entonces, si no cambian los actuales patrones de consumo, en torno al 40% de la gasolina que se venderá la habrán cargado en sus coches conductores de la tercera edad».
Añadió que «no vamos a una sociedad de ancianos demandando ser atendidos. Vamos a una sociedad de ciudadanos que, a edades que hoy consideramos ya relativamente provectas, van a ser ciudadanos activos, con ambiciones y apetito de consumo. Las sociedades más competitivas serán aquellas cuyas personas mayores tengan mayor capacidad de consumo».
Para la presidenta de Unespa, abordar estos retos futuros requiere del fomento de la colaboración privado-pública en muchos ámbitos («no de una mera privatización»).