Cualquier comprador debe hacerse cuatro preguntas cuando acceda a un sitio web de comercio electrónico. En primer lugar, saber si la tienda existe realmente y cuenta con un número de teléfono para poder comunicarnos con sus responsables. En segundo lugar nos tenemos que asegurar de que no nos van a cambiar el pedido una vez hayamos facilitado la información de nuestra tarjeta. También conviene asegurarse de que la información de nuestra tarjeta se use sólo para esa compra, así como de que la persona responsable de la tienda tenga medios para saber si la información facilitada es real y legal.
Estos son los nueve consejos que El Confidencial facilita para una compra online segura:
1.- Navega desde una conexión segura. Antes de nada: ¿desde dónde navegas? ¿Desde casa? ¿Desde una wifi pública? Si vas a introducir datos de pago, lo ideal es que navegues desde una red cerrada o compartida con personas de confianza: las de casa y el trabajo (según dónde trabajes) serán perfectas. Procura evitar las wifis públicas y las conexiones abiertas de los bares. Es poco probable que el ladrón de tarjetas esté precisamente en la mesa de atrás, pero no imposible. Como en casa, en ningún sitio.
2.- No pinches en ofertas de correo. Si eres medianamente descuidado con tu correo electrónico, es probable que tu bandeja de entrada se llene de spama diario. Muchos de los mensajes que te lleguen tendrán suculentas ofertas de multitud de portales, pero conviene tener cuidado: puede que creas pinchar en el acceso directo a un comercio online, pero en realidad el correo te lleve a otro sitio (no precisamente seguro). Si ves en un email una oferta, abre una nueva pestaña y entra directamente al portal.
3.- Cuidado con los precios sorprendentemente bajos ¿Cómo, un iPhone 6 por 100 euritos de nada? Ojo, que eso huele mal. Aquí reina el famoso dicho: si algo parece demasiado bonito para ser cierto, seguramente no sea cierto. Si ves un producto a un precio tremendamente bajo, desconfía de manera automática. Si la oferta es de un timador, es probable que intente colarte alguna mentira como “la caja de estos iPhone perdió un precinto y por eso tenemos que venderlos baratos”, pero no te lo creas. Ante la duda, usa el sentido común.
4.- Infórmate sobre el sitio en el que compras. Si no sueles comprar por internet es probable que no conozcas casi ninguno, pero seguro que el nombre de alguno sí te suena. Haz un esfuerzo y, una vez más, usa el sentido común. Si la página te parece sospechosa, quizá una búsqueda en Google (“¿es seguro comprar en equis portal?”) te eche un cable.
5.- Comprueba la posibilidad de devolución. Te parecerá una tontería, pero este criterio sirve de gran ayuda. Cuando veas un producto, mira si hay posibilidad de devolución en caso de que no te satisfaga o te arrepientas al recibirlo. Si el aviso no está junto al producto, es probable que al final de la página haya un apartado llamado Política de devoluciones o similar. Si existe la posibilidad, ahí tienes un signo de confianza. En caso contrario no es aconsejable comprar.
6.- Ojo a la fecha de entrega. Este no es un consejo para comprar de forma segura, pero sí para asegurarte de que no quedarás mal con el destinatario de tu regalo. Piensa que en estas fechas hay mucha más gente que compra por internet, por lo que deberás asegurarte de que el paquete llegará a tiempo. No te preocupes, en estas fechas todos los grandes portales colocan, justo al lado del precio, un aviso del plazo de entrega.
7.- Navega de manera segura. Esto no tiene nada que ver con el wifi, aunque pueda parecerlo. Una vez que hayas seleccionado el producto que quieres comprar y te hayas registrado, pasarás a hacer el pago. Entonces fíjate en la barra de direcciones, en la parte superior de tu navegador, donde pone la dirección web en la que estás. Si la dirección empieza por “https”, significa que estás en una conexión privada y, por tanto, segura. Si solo empieza por “http”, significa que tu conexión no es privada. Y si no es privada, no es un buen sitio para meter tus datos de pago.
8.- Formas de pago. Si nunca has comprado por internet, a la hora de pagar es probable que prefieras hacerlo contrareembolso. Sin embargo, no desprecies las vías online, siempre que veas que son seguras. La opción más clásica es la de pagar con tu tarjeta de crédito, aunque también puedes ver otras opciones seguras como PayPal y Trustly.
9.- Hazte una tarjeta virtual. Si quieres pagar con tarjeta pero no te hace demasiada gracia poner tus datos por miedo a los ojos enemigos, no te preocupes. Lo más probable es que tu banco te dé la opción de hacerte tarjetas virtuales de un importe exacto (justo el dinero que quieres gastarte) y con una caducidad concreta (el día en que vas a hacer la compra). Esta es una buena forma de pagar sin exponer tus datos, aunque quizá necesites unas habilidades informáticas mayores de las que te hemos presupuesto si nunca has comprado por internet.